Isoniazida (H) 100 y 300mg. Comprimidos
Isoniazida (H) 100 y 300mg. Comprimidos
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Grupo terapéutico y sus características
Antibiótico tuberculostático. -
Acción terapéutica
Antituberculoso bactericida. -
Mecanismo de acción
Inhibe la síntesis de ácido micólico, componente esencial de la pared celular de Mycobacterium tuberculosis. -
Indicaciones
Tuberculosis: quimioprofilaxis y tratamiento. -
Contraindicaciones
- Alergia a la isoniazida o alguno de los componentes de la formulación.
- Enfermedad hepática activa descompensada de cualquier etiología.
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Interacciones
Metabolismo: hepático mediante acetilación. Inhibe el citocromo P450 (CYP3A4), generando interacciones de importancia clínica.- Carbamazepina: puede verse retardado su metabolismo con la consiguiente toxicidad por el antiepiléptico.
- Fenitoína: la isoniazida puede aumentar los niveles séricos de fenitoína causando toxicidad.
- La administración concomitante de la isoniazida y la teofilina puede aumentar los niveles plasmáticos de teofilina y en algunos casos una ligera disminución en la eliminación de la isoniazida.
- Levodopa: puede inducir aumento de la presión arterial o disminución de la eficacia de levodopa.
- Clopidogrel: podría disminuir su eficacia.
- Alprazolam, midazolam o triazolam: aumentan los niveles de benzodiacepinas y los efectos adversos como posible depresión respiratoria.[1]
- Simvastatina, atorvastatina, pravastatina: puede causar aumento de los niveles de las estatinas con el consiguiente aumento del riesgo de miopatía o rabdomiolisis.
- Valproato: posible aumento de los niveles plasmáticos de valproato, debe realizarse ajuste de dosis cuando se coadministra con isoniazida.
- Estavudina: no asociar a estavudina (actualmente en desuso).
- Anticoagulantes: aumento del riesgo de sangrado en pacientes anticoagulados.
- Paracetamol: puede aumentar el riesgo de toxicidad hepática con el uso de paracetamol.
- Alimentos: reducen la biodisponibilidad de la isoniazida, principalmente aquellos que contienen tiramina (queso, vino tinto).
- Alcohol: puede aumentar el riesgo de hepatotoxicidad, de potenciación de efectos depresores del sistema nervioso central o presentarse una reacción símil disulfiram.
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Efectos adversos
Se debe realizar un seguimiento clínico de los pacientes en tratamiento con el fin de detectar y manejar en forma oportuna efectos adversos a la medicación.- Neuropatía: es un efecto adverso por toxicidad (dosis dependiente) y se produce con mayor frecuencia en pacientes predispuestos a desarrollar neuritis (alcohólica, diabética, por insuficiencia renal crónica, malnutrición o HIV), por lo general es precedida por parestesias en pies y manos.
- Hepatitis: el riesgo de desarrollar hepatitis por H aumenta con la edad. Es del 0,3% aproximadamente en pacientes jóvenes sin hepatopatía previa, y se incrementa en los mayores de 35 años.
- Otros: reacciones de hipersensibilidad (rash, fiebre, anemia hemolítica, vasculitis, neutropenia), intolerancia digestiva, somnolencia, letargia hiperglucemia, ginecomastia.
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Dosificación y modo de administración
- Administración oral, lejos de las comidas.
- Dosificación: adultos, 5 mg/kg/día dividido en una o dos tomas. Niños, 10 mg/kg/día. La dosis máxima es de 300 mg diarios.
- Otra opción es el régimen intermitente en el cual se administran 10 mg/kg/día tres veces por semana, en días no consecutivos siendo la dosis máxima por toma 600 mg.[2]
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Consejos y advertencias
- El uso de isoniazida, deberá supervisarse cuidadosamente en las siguientes situaciones:
- Usuarios diarios de alcohol: la ingestión diaria de alcohol puede estar asociada con una mayor incidencia de la hepatitis con el uso de isoniazida.
- Pacientes con enfermedad hepática crónica activa o disfunción renal grave.
- Personas mayor de 35 años.
- Uso simultáneo de cualquier medicamento administrado crónicamente.
- Historia de suspensión previa de la isoniazida.
- Existencia de neuropatía o condiciones que predispongan a la neuropatía periférica.
- Uso de drogas inyectables.
- Mujeres embarazadas o en período posparto.
- Personas HIV positivos.
- En personas mayores de 35 años debe solicitarse laboratorio basal con enzimas hepáticas y luego de forma periódica, con control clínico mensual durante todo el tratamiento.
- Se recomienda realizar interconsulta con un especialista para tratar pacientes con enfermedad hepática avanzada o inestable preexistente y realizar un monitoreo clínico y exámenes de función hepática.
- Puede desarrollarse hepatitis grave, a veces fatal, asociada al tratamiento con isoniazida incluso después de algunos meses de tratamiento (frecuentemente los primeros 3 meses), el riesgo está relacionado con la edad y se incrementa con el consumo diario de alcohol (recomendar suspender el consumo de alcohol).
- En los casos donde se produce alteración de la función hepática los niveles de enzimas pueden volver a la normalidad a pesar de la continuación de la droga, pero en algunos casos se produce disfunción hepática progresiva.
- El tratamiento preventivo debe ser diferido en personas con enfermedades hepáticas agudas.
- En pacientes con enfermedad renal se debe solicitar clearance de creatinina de 24 horas.
- En pacientes embarazadas, en período de lactancia, VIH positivo, alcohólico, desnutrido, con enfermedad hepática crónica y/o falla renal, se aconseja prescribir piridoxina 25 mg/día para prevenir la neuropatía periférica.
- Para tratar una polineuritis ya constituida se aconsejan 100 a 200 mg/día de piridoxina.[3]
- En pacientes que toman carbamazepina monitorear los signos y síntomas de toxicidad.
- Se recomienda ajustar la dosis de fenitoína y de valproato durante el tratamiento con isoniazida, ya que se puede producir aumento de las concentraciones séricas de dichos compuestos con la consiguiente toxicidad.
- Embarazo: categoría C de la FDA. Puede ser utilizada durante el embarazo.[4]
- Lactancia: riesgo muy bajo, por lo tanto es compatible durante dicho período. Las pequeñas concentraciones de isoniazida en la leche materna no producen toxicidad en el recién nacido. La mujer que amamanta puede recibir todos los medicamentos antituberculosos de primera línea y el bebé no debe ser separado de la madre y puede amamantarlo (si fuese necesario con utilización de barbijo).
- Los pacientes deben ser instruidos para informar inmediatamente de signos o síntomas compatibles con daño hepático u otros efectos adversos, los cuales incluyen: anorexia inexplicable, náuseas, vómitos, orina oscura, ictericia, erupción cutánea, parestesias persistentes de las manos y los pies, fatiga persistente, debilidad o fiebre mayor de 3 días de duración y/o molestias abdominales, sobretodo el cuadrante superior derecho. Si se detectan signos sugestivos de daño hepático, la isoniazida debe interrumpirse de inmediato, ya que el uso continuado de la droga en estos casos se ha reportado que causa una forma más grave de daño hepático.[5]
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Puntos clave
- Una vez detectado un paciente enfermo de Tuberculosis (TB) se deberá trabajar fuertemente en su seguimiento y adherencia al tratamiento. Al mismo tiempo es importante realizar los máximos esfuerzos para conocer y estudiar la situación de los contactos cercanos al paciente, con el objetivo de detectar personas con mayor riesgo de infectarse o de enfermar de TB o que ya se encuentren cursando la enfermedad.
- En relación a la profilaxis con H, recordar que, los niños menores de 15 años presentan mayor riesgo de progresar a enfermedad tuberculosa y de presentar formas más complicadas de la misma, y a su vez tienen menor riesgo de hepatotoxicidad por H que las personas de mayor edad, motivo por cual la evaluación riesgo/beneficio en este grupo etáreo se inclina (en caso de estar indicada) hacia la realización de la quimioprofilaxis (una vez descartada enfermedad y siempre y cuando no se haya detectado resistencia a H en el caso índice).
- Importante: el hecho de que la indicación prioritaria de quimioprofilaxis se concentre en los menores de quince añosno contraindica la utilización de la misma en personas de mayor edad, especialmente en menores de 35 años contactos estrechos de pacientes bacilíferos.
- El tratamiento de la tuberculosis consiste en una fase inicial diaria y una fase de continuación, ambas fases deben ser totalmente supervisadas a fin de garantizar el cumplimiento del mismo.
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Bibliografía